En la etapa de la adolescencia se generar una diversidad de cambios en la persona, uno de ellos es el desarrollo intelectual y moral, veamos de que tratan cada uno de ellos.
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Cambios generales en la adolescencia
La adolescencia es la etapa de la vida donde se origina la maduración entre la niñez y la edad adulta. Se contempla desde el inicio de la pubertad hasta la madurez, y comienza, mayormente, a la edad de catorce años en los hombres, y de doce años en las mujeres. En la adolescencia se generan considerables cambios físicos y fisiológicos, por ejemplo:
Cambios Físicos: aumento de la estatura y en los rasgos físicos. Desarrollo de las distintas características física; en el caso de los varones comienza aparecer el vello facial, corporal y púbico, además el tono de cambia se torna más pronunciada. En cuando a las mujeres aparece el vello corporal y púbico, los senos se desarrollan y las caderas se ensanchan.
Desarrollo Intelectual: según los psicólogos e la etapa de la adolescencia donde se origina el inicio de la etapa del pensamiento de las operaciones formales.
Orientación Sexual: desarrollo de las apariencias sexuales primarias y el instinto sexual.
Cambios Emocionales: en la etapa de la adolescencia se genera un estrés emocional desarrollados por los cambios psicológicos importantes y rápidos que se producen en la pubertad que es la etapa previa a la adolescencia.
Desarrollo integral e intelectual
De los cambios mencionados anteriormente, el desarrollo intelectual es el más relevante, este es la última etapa del desarrollo del pensamiento, que da la capacidad de percibir la realidad; se forma entre los doce y los veinte años de edad, es importante su estimulación ya que no todas las personas alcanzan desarrollar el pensamiento formal en la adolescencia ni en la edad madura. En relación a esto también puedes conocer el ciclo vital de la familia y sus etapas, lo cual te ayudará a prepararte para la adolescencia de tu hijo.
Este desarrollo se produce de una manera significativamente distinta al desarrollo físico. Su desarrollo es manera progresiva, relativamente rápida en general pueden ser tres o cuatro años de pendiendo de la persona, en cuanto al desarrollo intelectual puede tardar entre siete y ocho años y es muy distinta en cada persona.
Los maestros desempeñan un papel fundamental en la madurez intelectual de los adolescentes. Es importante tener en consideración que el origen del pensamiento formal influye directamente el ambiente que les rodea.
Los educadores deben asegurar la estimulación sensorial e intelectual en la edad comprendida entre los 11 y 20 años ofreciendo ocasiones de reflexión y de diálogo sobre diversos temas, para desarrollar el pensamiento y la crítica. Se debe considerar que, en ambas edades, será determínate, por su influencia, la elección de la mejor institución educativa posible.
Los cambios físicos generados durante la pubertad son consecuencia de la dotación genética, no obstante, los cambios en la organización del pensamiento requieren la influencia positiva del entorno social. Se ha llegado a esta afirmación ya que, en algunas de las sociedades, hay personas adultas que no demuestran capacidad para superar con éxito ciertas pruebas que requieren de habilidades intelectuales pertenecientes del pensamiento formal.
El tiempo infantil previo a la adolescencia es realmente determinante. Ya que en él se forman las bases fundamentales del futuro adulto, de ahí la importancia del esfuerzo para formar un adolescente constituido en valores.
A lo largo de la infancia se da el desarrollo de la percepción mediante de los sentidos; se desarrollan habilidades y capacidades como la imaginación, la memoria, y la atención; se refuerzan instrumentos básicos como el lenguaje y el cálculo; se genera, finalmente, una amplia y general base de conocimientos concretos a partir de la experiencia y la enseñanza sistemática. Relacionado a esto puedes leer sobre el desarrollo integral del ser humano.
Con la llegada de la adolescencia, se genera la eclosión del pensamiento, tendrá la capacidad de comprender la realidad, conocer que es posible y que no. Se dará el desarrollo intelectual para prepararse para su etapa próxima de adulto.
Es en la adolescencia, donde las personas adquieren la capacidad de pensamiento abstracto, que le posibilita realizar operaciones mentales.
Es el tiempo en que pasa de un tipo de pensamiento relacionado a lo tangible y a lo concreto, a una manera de pensar en el que ya puede hacer reflexiones, hipótesis, sobre sus propias ideas y emociones, debatir sobre las opiniones de su entorno, la toma de decisiones previendo de manera general las consecuencias y fomentar nuevos valores.
Desarrollo Moral
En el proceso de desarrollo intelectual se alcanza el nivel de razonamiento moral, aspecto en el que la moralidad se internaliza totalmente. El adolescente tiene la capacidad de percibir conflictos entre diversos patrones morales y poder elegir entre ellos. Relacionado a la moral también se encuentran implícitos los valores inculcados, por ello te invitamos a conocer la importancia de los valores en los jóvenes.
El desarrollo moral es el proceso progresivo del sentido individual de la justicia, y se centraliza más en las ideas que se tiene de la moralidad, que en la forma de actuar.
El manejo del comportamiento es interno, tanto en el análisis de la norma como en el razonamiento sobre lo que es bueno o malo. La comprensión de la moralidad puede ser incoherente con las acciones reales, por lo que la conducta moral es variante en cada situación, y es impredecible.
A lo largo del tiempo, el desarrollo de la moral ha sido expresado por multitud de autores. Entre ellos, se pueden destacan las teorías de los que veremos a continuación.
Según Jean Piaget
Psicólogo que defines dos tipos de moral:
La moral heterónoma. Es aquella que se posee en la infancia, de manera que las reglas son impuestas por los adultos y se cumplen por obligación y obediencia.
La moral autónoma. Surge en los 11 o 12 años, aproximadamente, cuando se inicia la adolescencia. En esta etapa, las normas ya no se consideran únicas e inmutables, sino que los adolescentes, a estas edades, tras un acto de reflexión, cooperación discusión con su entorno, generan sus propias normas. Por ende, las normas son cumplidas por respecto al acuerdo y no por obligación.
Así, según Piaget, los adolescentes presentan una moral autónoma, buscando un trato justo y equitativo para todos
«Las relaciones entre padres e hijos son, sin duda, no solo las de restricción. Hay mutuo afecto espontáneo, que va desde, primero, pedirle al niño actos de generosidad e incluso de sacrificio, hasta las manifestaciones muy conmovedoras que no son de ninguna manera prescritas.
Y aquí, sin duda, está el punto de partida para que la moral del bien que veremos en desarrollo junto de la moralidad del derecho o del deber, y que en algunas personas reemplaza por completo».
– Jean Piaget –
Lawrence Kohlberg
Por otro lado, el autor y psicólogo Lawrence Kohlberg expresa que el desarrollo moral avanza desde la infancia hasta la adultez, y se fundamenta en tres niveles:
Pre convencional: Las normas son externas a uno mismo y se cumplen sin entender la ética de las mismas. Se cumplen por miedo a castigos y satisfacer las expectativas que los demás tienen de uno mismo.
Convencional: en esta etapa las normas se cumplen por las expectativas que tiene el entorno de nosotros mismo y mantener el orden social
Pos convencional: En esta etapa se cumplen las normas, por ser evaluadas y comprendidas, además se adquieren una serie de valores que determinan el comportamiento.
Según estos niveles el autor establece que los adolescentes se encuentran en la etapa convencional, intentando comportarse de acuerdo a las razones relacionadas con las expectativas sociales.
«La acción correcta tiende a ser definida en términos de los derechos individuales y las normas generales que se han examinado críticamente, y aceptadas por toda la sociedad».
-Lawrence Kohlberg-