El bien común, una descripción bastante compleja y que envuelve un sin fin de aspectos, descúbrelo todo aquí a continuación; su definición, características, los aspectos que lo definen y mucho más.
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¿Qué es el bien común?
Muchos habrán escuchado antes el término «bien común», y en sencillas palabras es aquello con lo cual una sociedad o un grupo social se beneficia. En este grupo entran entidades o instituciones, o cualquier núcleo conformado por un grupo de personas.
Definición
Como se mencionó anteriormente, definir que es el bien común depende de muchos factores y es mucho más complejo de lo que puede parecer. El bien común no depende de la suma de cada gusto de los individuos que componen el grupo social, es invisible, indetectable, y solo depende de la colaboración entre todas sus partes.
Ahora bien, el bien común se entrelaza con lo que es el bien particular de un individuo, ¿qué quiere decir esto? pues que el bien individual no se logra si no tiene como finalidad orientarse al bien comunal; y este último se alcanza, solo si se logra el bien particular. Es decir, que sin uno, no se da el otro y viceversa.
Por ejemplo, si una persona realiza una acción que tenga que ver con el cumplimiento de los códigos sociales, esto conlleva a que el actuar social logre su máxima plenitud para el bien común. Esto entonces señala al bien común, como una parte íntegra del bien moral en una sociedad.
Para que el bien común se logre correctamente, siempre debe estar dirigido para el bienestar colectivo, logrando a su vez, que exista un progreso en la sociedad.
Como se puede observar, el bien común es algo más allá y tiene un papel importante para la sociedad, es por ello que el Estado debe resguardarlo e incentivarlo, para que así la sociedad se nutra de sus beneficios.
Otros aspectos que integran el bien común son: el libre albedrío, la justicia, la paz y el reparto íntegro y por igual de los bienes, todos ellos garantizan unas óptimas condiciones sociales y por ende, un bien común para todos.
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La sociedad se rige por reglas y normas, y si la sociedad o el ser humano no reaccionan ante ellas o no busca el bienestar común, no sería llamado un buen cristiano.
Es obligación de un ciudadano cristiano vivir y contribuir en la sociedad y el bien común, ya sea en la economía, en la familia o en el trabajo.
Ahora bien, la educación es muy importante para formar ciudadanos íntegros, y por ello en la escuela, en colegios o universidades, es necesario la creación de servicios a la sociedad, para con ello incentivar el bien común.
Tener una buena base, asegura a un individuo responsable, que procura resolver de la mejor manera los problemas del día a día, y con ello beneficiará al bien comunal.
Aspecto económico: la riqueza común
El bien común, como muy bien se mencionó antes, se encuentra compuesto por una variedad de aspectos, y uno de ellos es el económico.
En la economía, la definición del bien común es aquella donde se asegura la estabilidad socioeconómica de la sociedad, y por ende no debe pertenecer a nadie en particular y debe ser de uso libre.
Cada bien público debe estar al alcance de todos, es decir, un solo individuo no puede consumirse cada bien que se encuentre presente, sino que debe haber disponibilidad para todos.
Para que una persona o una sociedad logren alcanzar su máximo potencial, requiere de una estabilidad o las condiciones económicas para ello. No obstante, es necesario aclarar, que a pesar de que el bien común en el aspecto económico, es aquel que debe asegurar el bien material para su desarrollo, es fundamental que la riqueza sea para todos. Sin el bienestar colectivo, no hay bienestar general.
Las nuevas tecnologías deben encontrarse dentro de todos los centros educativos, y las empresas, al asumir la vinculación, se permite el beneficio mutuo entre cada uno de sus miembros.
No obstante, es necesario aclarar, que el control social se trata de un grupo de prácticas, valores y otros componentes, que se encargan de mantener el control en la sociedad. Este control es ejercido por el Estado, que es el responsable del bien común y de que todas las leyes se cumplan; a su vez, es ejercido también por las personas que lo integran.
El destino universal de los bienes
No solo la riqueza se encuentra dentro del aspecto económico del bien común, ya que como definición del destino universal de los bienes se dice:
«Dios ha destinado la tierra y cuanto ella contiene para uso de todos los hombres y pueblos. En consecuencia, los bienes creados deben llegar a todos en forma equitativa bajo la égida de la justicia y con la compañía de la caridad».
Esto quiere decir, que todos los bienes deben ser repartidos de manera igualitaria. Dios, el todopoderoso, ha creado la tierra para que todos se sustenten de ella, sin dejar a nadie por fuera o sin que se le dé a nadie un trato especial.
Este se le conoce como el destino universal de los bienes en la tierra, y se le señala como la habilidad del Señor para darles oportunidad a todos por igual, usarlo y beneficiarse de él para su desarrollo personal y social.
Toda persona debe ser capaz de dar y de recibir; y el crecimiento de uno no debe ser una muralla para otro, ni tampoco un pretexto para servirle; este es el principio del destino universal de los bienes.
Desde el ámbito social, el bienestar común se enfoca es en la comunidad o sociedad, y no en el bienestar de cada persona. Según Simón Bolívar, es derecho de todo hombre, el libre albedrío, la seguridad, el auge y la igualdad. Así mismo, él mencionaba que todos estos aspectos hacen la felicidad y debe ser obligación de la sociedad otorgarlos.
El gobierno que garantice un mayor nivel de felicidad, de seguridad social y estabilidad política, es aquel con mayor éxito. No puede haber bien común si no hay una sociedad equilibrada e íntegra, cada condición en la que vive la sociedad, cuenta, y es necesario que vivan de manera completa.
El estado, es el responsable de esto, y debe encargarse de proveer a todos, los medios para vivir de manera completa.
No obstante, es necesario que exista un control social de los sistemas tecnológicos para el bien común, para con ello saber que se está ayudando y nutriendo verdaderamente a la sociedad, y no se está perjudicando.
Pero antes de entrar de lleno en el tema, es necesario determinar que es el control social es, en sencillas palabras, un grupo de tareas que se encargan de mantener el control de una sociedad. En teoría, esto debería darse de manera libre, transparente y honesta, pero algunas veces se obtiene de manera violenta o por coacción, y es por ello que debe existir un monitoreo de las posibles consecuencias que puede acarrear el uso de dichos sistemas.
Responsabilidad de todos
Como dice la palabra, el bien común depende de todos, no solo de un individuo. Una persona no puede aislarse y crecer de manera individual. Este hecho, obliga a que cada persona aprenda las normas de la convivencia de diversas maneras, nadie, ningún núcleo social, puede eludir la importancia del bien común.
El bien común es un deber de cada uno de sus integrantes, y cada uno debe colaborar, de acuerdo a su capacidad, en el desarrollo y en la formación de una sociedad íntegra. Todos por igual, deber mejorar las condiciones humanas en la sociedad.
La concurrencia de cada uno de sus miembros es dedicación de todos, cada persona debe prestar atención a la educación familiar, a ser responsables en el trabajo, y que cada uno trabaje por un bien común.
Cada ciudadano debe, en cuanto pueda, formarse de manera activa en el aspecto público. Esto conlleva, a que se eliminen los engaños y aquello que quiera dañar al bien colectivo.
La comunidad política
Así como la sociedad tiene un papel fundamental en el bien común, el Estado también debe cumplir con este rol, y debe ser, además, la autoridad política. Una persona, la familia o cualquier ente, no tienen la habilidad de crecer de manera individual, y es allí donde entran las instituciones políticas, que tienen el propósito de facilitarles los bienes culturales, materiales o morales, para que puedan disfrutar la vida de manera completa.
Esto se logra a través del gobierno, ellos deben equilibrar los intereses sociales de manera justa, pero eso sí, están en la obligación de hacerlo con la mayor responsabilidad. Es por ello, que deben manejar 3 aspectos esenciales.
- El estado debe respetar a cada persona que compone el núcleo social, debe respetar los derechos humanos. El bien común debe otorgar las condiciones básicas para que el ser humano actué de acuerdo a su forma de ser, con total libertar y privacidad, incluyendo su orientación religiosa.
- El segundo aspecto, el bien común debe respaldar el bien social y el desarrollo de cada persona que lo componga. Verdaderamente es el Estado quien decide el bien común entre los diferentes intereses colectivos, pero es su obligación el suministrar a cada uno, lo necesario para vivir una vida digna y completa; es decir: comida, ropa, salud, trabajo, educación, cultura, el derecho a procrear, entre otros.
- Por último, el bien común debe ser imagen de estabilidad y seguridad, es decir, debe demostrar ser una sociedad justa para todos sus integrantes.
Es necesario aclarar que dicha autoridad es legítima, si se utiliza para el crecimiento del bien común, y que la forma de lograrlo es por medios completamente legales, morales y aceptables.
Aspecto filosófico: el bien común
La filosofía es un estudio o razonamiento de todo, normalmente conocido como la explicación de la existencia. En este caso, el bien común en el aspecto filosófico, es aquello que debe ser repartido para y por el beneficio de todos los integrantes de una sociedad, no solo este mejoramiento es material, también debe estar en todos los ámbitos.
El bien común se extiende a todas las condiciones para que el hombre, la familia y la sociedad puedan desarrollarse de manera completa, logrando su mayor potencial.
Este tipo de pensamiento, ha sido insertado en constituciones y legislaciones a lo largo de diversos países, e incluso, en las iglesias católicas a lo largo del mundo.
Un ejemplo, es la Doctrina Social de la Iglesia, más específicamente en la encíclica Rerum Novarum, en ella se observan los estudios de este concepto, y todo lo que lo involucra.
Esto se deriva de los griegos, es decir Platón, Aristóteles y en este caso Tomás de Aquino, que señala que el bien común promueve el cuidado de una sociedad, y la ley debe estructurarse de acuerdo al bien común.
El deber común se debe moldear a las acciones de cada uno de sus miembros, respetando los límites, claro está, para resguardar u obtener ese bien común. Es obligación del Estado defenderlo e incentivarlo en todos sus ámbitos, es decir: en la sociedad, en cada persona e institución.
Ahora bien, dentro de la filosofía existe una variedad de características del bien común, aquí te traemos las más importantes de entre todas.
Características
Como se mencionó, la filosofía estudia todo lo que existe, y en esta oportunidad se señalan algunos aspectos del bien común, estos son:
- El bien común se obtiene de la naturaleza humana, y por ello es superior a cualquier persona. Es decir, el individuo se maneja por un bien común, debido a que la sociedad hace lo mismo; ambas se encuentran subordinadas a un ser supremo, que es Dios.
- Como se ha mencionado, el bien común no es la suma de sus partes, ni tampoco de sus individuos, es un todo. Las personas dependen de la sociedad, sin ella no crecerían, y a su vez, la sociedad debe darle a cada miembro las condiciones necesarias para que se desarrollen por igual, para con ello fortalecerla.
No obstante, es necesario aclarar, que estas condiciones deben ser completas y no solo involucrar la parte material, la cual tiene un rol importante pero que no es parte de todo; esto se define como: condiciones de posibilidad. El bien común debe orientarse para todos por igual, y su deber es hacia las personas y no al revés. El bien común debe tener como bases la verdad, su estructura en la justicia y se fortalece con el amor.
Igualmente, debe cumplir con las exigencias físicas y espirituales del hombre, y es allí donde entra el Estado, aquel que tiene la responsabilidad de otorgarlo por las vías adecuadas y de forma ascendente, tomando en cuenta los valores morales que obsequien al ciudadano un crecimiento material y espiritual.
- El bien común obliga al Estado, y a todo gobierno, a mantenerse en la búsqueda del bien común, respetando en el camino sus principios y reglas jurídicas, éste debe ser realista y debe respetar las normas.
- Así mismo, obliga a los individuos a ser responsables y a tener una buena convivencia entre sus miembros. El Estado no es responsable de todo, cada uno debe ayudar y aportar.
- Obliga al ciudadano, y cualquier grupo, a colaborar por el bien común. Todos deben velar por todos, no solo ver por sus necesidades, cada uno debe acomodarlos de acuerdo a las necesidades de todos. Además, deben cumplir con las normas, reglas o procedimientos fijados por un gobierno; un individuo debe trabajar en pro de todos, no de manera individual.
- Otro aspecto importante del bien común, es que cada uno de sus integrantes debe velar por el cuidado de su entorno y por ello, del medio ambiente; esto es un reflejo de ser más humano.
- El bien común es algo progresivo, es un objetivo que se logra con ayuda de todos, no es algo que se obtiene de la noche a la mañana.
- El bien común busca satisfacer el avance y crecimiento de todos sus miembros, y para ello, sus principios se deben basar en la verdad y la justicia.
- Así mismo, debe abarcar todos los aspectos del hombre, ya sean físicos o espirituales.
Críticas
El bien común, como se pudo observar, es algo complejo y que abarca mucho más de lo que se puede observar a simple vista.
Según Karl Popper, filósofo austriaco, señala que el bien común no solo es eso, que según sus palabras es una forma platónica de verlo; la sociedad debe ser además fuerte y centralizada, debe estar compuesta por un corto número de filósofos, que tengan la tarea de gobernar de forma íntegra pero contundente, y que no se encuentren interesados en los derechos de las personas que lo compongan, sino que velen por el bienestar de la comunidad.
En otro aspecto, Jacques Maritain, filósofo francés, describe el concepto de Platón de forma diferente. El detalla que una ciudad no debe establecerse velando por la felicidad de un solo grupo social, sino, que debe velar para que el mayor número de personas sean felices.
Así mismo, señala que una sociedad no se preocupa por los intereses sociales ni la suma de ellos; si ese fuera el caso, sería una catástrofe y la fórmula para la destrucción de la sociedad, ya que sería una visión anárquica, y por ende los fuertes oprimirían de manera libre a los más débiles.
- El que existan métodos completamente racionales, para que con ellos se planteen de manera definitiva una meta final.
- Y a su vez, que los métodos para cumplirlos sean los mejores para todos.
Si estos dos aspectos no se cumplen, o no se llega a un acuerdo, no queda más que lograrlo con el poder o la coerción. Según Platón, si se quiere que una sociedad se desarrolle de la manera correcta, es necesario detener por todos los medios que nadie la corrompa. Todos deben cuidarla por igual, y vigilar que sus bases sigan las normas morales y busquen el bien común.
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