La cultura maya, al igual que cualquier otra en la historia, tenía una concepción de la vida única que estaba ligada a su mundo de referencias y en ella, se veían representadas sus creencias, temores y comportamientos. De estas representaciones culturales, precisamente surgen estos extravagantes y extraños animales mitológicos mayas. ¡Sigue leyendo para conocerlos!
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Origen de los Animales Mitológicos Mayas
El hombre prehispánico, aquel de esta cultura, relacionaba su sistema de creencias con la naturaleza y de allí surgían estos animales que poseían cierto control sobre su vida otorgándoles aires de deidad. Eran, si se quiere interpretar así, la materialización de lo ideal representado en animales.
Poca información se ha podido conservar acerca de estos animales mitológicos mayas producto de la dominación española que, al invadir estos territorios, destruyeron todo cuanto pudieron para desaparecer el rastro de esta antigua cultura mesoamericana. Pero, aún así, con los esfuerzos de investigadores, se han podido compilar una serie de datos que conservan cuestiones elementales que hasta nuestros días siguen teniendo importancia.
En la cosmovisión mesoamericana, los animales, eran símbolos porque en ellos se condensaban la memoria cultural de la época representando así cualidades, tiempos primigenios, rangos Y PODER. Estos tomaron la forma de lo que demandaba el contexto según las propias necesidades de la idiosincrasia maya.
Los dioses prehispánicos, curiosamente, llevaban con ellos alusiones o características de animales según la cualidad que estos tenían. Mostrando con esto un aspecto muy importante de la cultura maya, que es el de darle admiración a las capacidades y aptitudes de los animales.
Cualidades de los Animales Mitológicos Mayas
Los Nahuales eran hombres sobrenaturales capaces de convertirse en estos animales y por esto, un animal mitológico no era tan solamente un ser más que poblaba su hábitat, sino que, los mayas, al relacionarlos con lo extraordinario, los veían como seres dignos de admiración y veneración aunque, al mismo tiempo, podían temerles también.
Las criaturas podían ser guardianes de ciertos territorios, y por tanto, estos les podían rendir ofrendas dado que al ser protectoras de lo que ellos querían resguardar; estas representaban algo positivo y eran, más bien, recibidas con brazos abiertos por esta civilización.
Existían, del mismo modo, criaturas que no eran tan bien esperadas por los mayas. Eran estas dignas del miedo y del temor, ya que, en su obrar demostraban ser capaces de hacer cosas devastadoras y totalmente apabullantes que estremecían a todo aquel que se les atravesara.
Los mayas les asignaban a los animales, indistintamente de si eran estos mitológicos o no, unas particularidades que los deidificaban porque en situaciones de alguna importancia los usaban como símbolos de valentía; muestra de ello es el caso del jaguar. Este felino poderoso, fue utilizado como apoyo para los momentos en los que se avecina alguna guerra y se necesitaba depositar la fe en alguna fuente de poder.
El jaguar era el animal que acompañaba a los hombres más fuertes, valientes y aguerridos que se disponían a enfrentar una realidad para cambiarla. Era este felino, entonces, el elegido para las situaciones dificultosas que en la cultura maya poseía un incomparable poder.
Podríamos, sencillamente pensar que la creencia en imágenes o representaciones es algo nuevo o que solo le corresponde a las religiones con más influencia que conocemos, pero no; los mayas también, aunque de manera distinta y particular, creyeron en lo que en el momento o en el contexto parecía más idóneo con el fin de darles fuerza y motivo en su combatir diario; alguna fuente de poder que les permitiera avanzar hacía lo que hoy se conoce como una civilización de mucha influencia.
Animales Mitológicos Mayas con Mayor Importancia
Los animales que mencionaremos a continuación fueron, para esta curiosa y extravagante civilización mesoamericana, unos de los más importantes por sus rasgos imponentes de belleza y carácter; tanto así que, hoy la información de estos se guarda como uno de los datos trascendentales que marcaron y seguirán marcando la historia de la humanidad.
Quetzal (Pharomachrus)
Se trata de un ave con plumaje muy colorido de la familia de los trogones que se alimentan de frutos como aguacates silvestres, principalmente.
Esta ave representa, nada más y nada menos, que una de las criaturas míticas más importantes para la cultura maya porque era fuente de vida, abundancia y fertilidad. Ellas eran sagradas, tanto así que su plumaje colorido era adorno todo cuanto representaba mucha importancia por su poder o valía.
El plumaje de estas aves eran color verde metálico y rojo, en el caso de los machos; y en el de las hembras también, pero con la diferencia de que era un poco más opaco. Estas plumas eran tan valiosas para los mayas que, representaban una moneda de cambio.
Tal era la importancia de esta ave que de su nombre han sacado también la denominación de uno de sus dioses Quetzalcóatl, que es el que representa la luz, la vida, la civilización, el conocimiento y también la fertilidad.
Si alguien en aquella época se atrevía a capturar o a hacerle daño a este animal era una causa para penalizarlo con la muerte. Además, lo familiarizaban con el sol por sus plumas brillantes que simbolizaban las flechas del astro.
Hoy en día estas aves representan la libertad, ya que se dice que para la época mesoamericana estas podían cantar y que después de la llegada de los conquistadores que acabaron con esa cultura, cesaron su canto por completo. Se dice que cuando estos animales se acercan a la verdadera libertad es que recuperan su canto.
Mariposa
Hay una muy hermosa e interesante anécdota acerca de lo que esta cultura creía de las mariposas y no se podía esperar otra cosa dado que son seres vivos espléndidos, ¿no es así?.
Para el mesoamericano, las mariposas, representaban una conexión con la realidad y el cambio constante que esta tenía. Eran también la imagen viviente de los guerreros que habían caído en batallas gloriosas o en sacrificios.
Un dato interesantes es que esos luchadores, luego de que morían acompañaban a uno de sus dioses (el que representaba al sol) y luego de cuatro años, estos tomaban la forma de una mariposa para que de alguna manera permanecieran eternamente en el tiempo. Lo cual es curioso porque si era de esta forma, ¿creerían ellos que las mariposas eran inmortales?.
Mariposa Galáctica o Hunab Ku (Incorpórea)
Bien, primero vamos a develar cuál es el origen etimológico de tan extraño nombre. La palabra Hunab quiere decir cosa solitaria y la de Ku significa Dios.
Si una mariposa en su nombre tiene la palabra de Dios en su significado debe ser importante. Veamos por qué. Se dice de esta mariposa que su representación era incorpórea; es decir, que no tenía una forma en específico y que no se podía tocar. En ese sentido, ella vendría a ser algo así como lo que representa un Dios.
Esta fabulosa mariposa era considerada la dadora del movimiento y de la medida de todo lo cuanto puede existir y existirá. Para algunos era considerada como el Dios supremo y creador de todos los mundos posibles.
La galáctica era la representación de la más pura inteligencia y de la totalidad de toda la humanidad. Es decir, que ella era absolutamente todos los hombres y las mujeres. Convirtiéndose esta en la producción y contenedora de toda la humanidad.
Los mayas creían que esta comprendía toda la conciencia de la que nacía toda materia y antimateria habida y por haber. Para esos precursores de otra astronomía, esta criatura era el centro de toda la galaxia del que surgieron el sol, los planetas, los sistemas solares y las estrellas. Entonces, lo que marcaría el rumbo de la humanidad sería precisamente ese centro de poder del que nacía la vía láctea.
Mariposa Monarca
De la mariposa monarca se sabe mucho hoy día porque, además de ser preciosa, tiene una presencia física masiva y cualquiera la reconoce a la distancia. Pero, apuesto a que muchos no conocen que dentro de la cantidad de animales mitológicos mayas tiene un significado más allá al de ser una criatura hermosa con alas de color naranja con negro.
En el México antiguo, estas mariposas eran consideradas como la representación física de aquellos niños que murieron y volvieron de esa suspensión a la vida; haciendo metamorfosis para convertirse en una de estas criaturas. Así que, cuando alguna de estas personas de esta antigua civilización veían a una, pensaban que era algún niño que, por su muerte temprana que dejó una marca en su memoria, venía a hacerles compañía o a recordarles la que alguna vez fue su existencia.
Che Uinik (Hombre Salvaje)
De este Che Uinik hay una leyenda muy aterradora que relata que cuando alguien está muy lejos de su casa, en un bosque yucateco se aparece este gigante. Este, denominado también ser de los bosques, podría parecer inofensivo de no ser porque se alimenta de la carne humana.
Es muy grande y su andar no es muy estable, dado que carece de articulaciones y huesos; también sus pies están invertidos. Le cuesta tanto caminar que necesita sostenerse de algún árbol o rama gruesa de este para poder ejercer su andar.
Fácilmente podía este gigante pasar desapercibido porque su apariencia se confunde fácilmente con la del bosque, y así podía acechar a sus victimas de manera de más efectiva.
Esta criatura entra en la clasificación de los animales míticos mayas como uno de los bacabes, que eran todos gigantes. Y sí que había una forma de salir ileso después de que este había notado presencia humana. La única manera de librarse de sus garras es una muy curiosa y que parecerá contradictoria tratándose de un gigante, pero de este mundo mesoamericano, podemos esperar increíbles historias. Bien, al punto: la manera efectiva de salir del apuro de estar acorralado de este era haciéndolo reír.
Los Che Uinik parecían tener un gran sentido del humor, dado que este era su talón de Aquiles. La leyenda cuenta que, cuando algo le daba risa, caía al suelo por las carcajadas y que ese era el preciso momento en el que su presa podía huirle. Así que, el que se encontrara atrapado, tenía cierta esperanza de salir a salvo mientras supiera hacer chistes que hicieran reír al hombre del bosque.
Dtundtuncan
Dtundtuncan significaba para los mayas El que va por el cielo, aunque también lo llamaban Kakaschuch que se traduce como Pájaro del mal. ¿Qué pájaro dentro de la fauna de los animales mitológicos mayas podría recibir un nombre tan aterrador como este? Algo tendría que ser verdaderamente terrible como para que esta civilización le asignara a éste un nombre como tal.
El Pájaro del mal tan solo tenía una sola pata, por lo cual era inválido; y no solo adolecía de esto, sino que también le faltaban ambos ojos. Por ojos este tenía solo dos cuencas negras y vacías. Este no sabía cantar y solo podía emitir un sonido que no era muy agradable; algunos dicen que era similar al de un cuervo.
Era una criatura corpulenta y con un plumaje lustroso. Había sido ideado por el demonio Kakasbal y, cuando este así lo deseaba, se aparecía transmutado en este pájaro. Y esta es la razón por la que era temido. Además, se decía que venía al mundo a llevarse las almas de los niños mayas.
Estos pájaros engendraban crías que en un principio eran huevos que dejaban en las ruinas de esa civilización, pero en la medida en la que la población fue en aumento, estos tuvieron que buscar otros sitios donde depositarlos.
Y cuando estas crías nacían representaban un verdadero peligro para los niños mayas puesto que al momento de tener apetito simplemente se le acercaban y con su aliento sorbían su vida.
Ver a un Dtundtuncan para un maya significaba de manera inmediata el acto de su muerte. ¡Cuánto poder debían ejercer esta ave para infundir inmenso miedo en una población entera!
Ek Chapat
Aparentemente Ek Chapat resultaba ser un horripilante animal porque en su corporeidad se notaban unas extrañas características como que este se comprendía de siete cabezas y cientos de pies. Este ser tenía unos malvados y terribles poderes. Dicen que sus cualidades eran parecidas a las de la esfinge de la cultura griega que, asesinaba a todo aquel que no supiera la respuesta correcta de la adivinanza que esta le hacía.
Ahora, veamos por qué Ek Chapat resultaba tan terroríficamente peligroso para los mayas. Parece que este ser de tan espeluznante apariencia, abordaba a los viajantes que se le aparecían con una serie de acertijos o adivinanzas (parecida situación la historia de la esfinge) y; cuando estos no acertaban con su respuesta, este ser de siete cabezas, los devoraba sin ningún tipo de piedad hasta que no quedaba nada de ellos.
Era llamado Señor de la Escalopendra y la leyenda dice que este servía de centinela para otro ser mitológico llamado Hua Hua Pach. También se dice de este que cuando estaba despierto mantenía los ojos cerrados y cuando dormía parecían estar abiertos, cosa que podía despistar a cualquiera que tratara de hacerle daño.
Una de las anécdotas mayas es que uno de los viajeros, por fin, pudo develar una de las adivinanzas obligando a Ek Chapat a compartir sus privilegiados poderes con él.
Este viajero que le ganó en sus temibles embrollos, aunque compartía sus poderes, no tenía las mismas intenciones que la temible criatura; por lo que no quería aceptar compartir el trabajo del villano que se le propuso tener, entonces, a partir de eso, el viajero aceptó tener un duelo a muerte con Ek Chapat en el que solo uno salió victorioso.
Al final, los caminos del Mayak quedaron libres porque el viajero ganó y logró derrotar a esta temible criatura. Dejando así, a los que quisieran transitar por dichos espacios, libres para siempre de las malignas intenciones de ese monstruoso ser mitológico.
Algunos prefieren creer que Ek Chapat no era tan terrible y que simplemente estaba por encima de nuestra cadena alimenticia, que lo que hacía era muy natural y que, al igual que la humanidad, se encarga de la caza animales, éste tenía su forma de atrapar su alimento con su particular manera.
Además de dejar que ellos pudieran sobrevivir si lograban adivinar qué era lo que había detrás de su pregunta o acertijo, tenía otra característica y esta consistía en que no le gustaba alimentarse de mujeres porque tenían un sabor muy dulce y empalagoso.
Alux
Estos eran los famosos duendes o enanos de la cultura maya y estaban caracterizados por habitar en los bosques y generar situaciones de inestabilidad y locura.
Solían tener la estatura de las rodillas promedio de un humano y vestían con la tradicional indumentaria de un maya cualquiera. La leyenda cuenta que estos personajes no se podían ver, puesto que eran invisibles. Tomaban la forma de algún animal, en ocasiones, para poder fastidiar a las personas y espantarlas; aunque también tomaban forma humana para mezclarse entre ellos.
Se dice de los Alux que habitaban en canotes y grutas y que, además, son atraídos por y engatusados por humanos cuando les hacían ofrendas.
Estos duendes eran nada más y nada menos que los encargados de proteger el mundo subterráneo maya, el Xibalbá. Además había que pedirles permiso cada vez que alguien deseaba ingresar a un bosque o santuario porque, de no ser así, estos pequeños causaban desastres naturales como tormentas y rayos, aunque también enfermedades graves y accidentes.
Vaya poder para seres tan pequeños, ¿no? Esto demuestra que para los mayas el poder no solo residía en el tamaño ni en la fuerza bruta porque unos pequeñísimos seres podían causar una revuelta en su cotidianidad.
Otros datos de los Alux
En la actualidad, en la que aún los mayas persisten, se cree que los Alux protegen las propiedades de los campesinos. Tanta es la fe que les tienen, que en esas casas o recintos se le construye una casita que es especialmente para ellos y es llamada kahtal alux que se traduce como Casa del Alux. Estos lugares que se supone deben alojar al Alux es construido donde se encuentra la milpa de los propietarios.
La milpa es un famoso agroecosistema de aquella antigua civilización que se concentraba en cultivar sus principales rubros: el maíz, el frijol y la calabaza (apodados a veces como Las Tres Hermanas).
La casita construida para estos enanos tiene sede en la milpa de los campesinos dado que desde ahí ellos pueden proteger sus cultivos. Sí, estos son considerados como guardianes de los sembradíos. Pero usted se preguntará qué es lo que hacen para proteger esos cultivos; pues, ellos llaman a la lluvia para su riego, ayudan al crecimiento del maíz y silban para espantar a los animales que vienen a comerse la cosecha.
Otra de las maneras en las que estos duendecillos cuidan los maizales es silbando cuando hay un ladrón cerca para avisarle a los campesinos que deben estar alertas para correrlos del sitio.
Datos curiosos de este animal mitológico
Un dato muy curioso acerca de las casas del Alux es que después de han pasado siete años desde que se ha construido, el campesino debe cerrarla y asegurarse de que el pequeño se encuentre dentro de ella porque se cree que después de este periodo empiezan a descontrolarse ocasionando desastres a su alrededor, repercutiendo de forma muy agresiva sobre las personas que puedan encontrarse cerca.
Vemos cómo es que el Alux para los mayas tiene un aspecto favorable, como protector; pero también posee sus cuestiones desfavorables, dado que estos pequeños parecen no tener un buen manejo de sus emociones. Probablemente, si existieran en nuestra civilización actual, los llevarían con un psicólogo para ver de dónde reside tanto desequilibrio.
Existen relatos de viajeros que comentan que el alux se detiene a pedirles alguna ofrenda, y cuando este acepta, cuidan de los aventureros en su travesía como forma de agradecimiento y pago. Pero, de aquellos que se niegan a ayudarles con algo, se entiende que no les va bien en su andar y terminan perjudicados con enfermedades, implicados en algún desastre natural y además, siendo atacados por algún malhechor.
H-Wayak
Se trata de uno de los animales mitológicos mayas que habitaba en los bosques. Este era un gigante que era muy temido en la época dado que infundía un gran temor. En un principio, a cualquier maya común, le parecía que era tan solo un hombre. Hablamos de que en la distancia lo percibía como uno, pero en la medida en la que este se iba acercando cada vez más y más, se daba cuenta de que eras un ser de espeluznante apariencia y que su tamaño era muchísimas veces más grande del que había percibido.
Nadie sabe qué efecto era el que causaba este gigante para aparentar a lo lejos un tamaño que no tenía, pero sí que se tiene certeza de que esa táctica tenía el fin de poder acercar a sus víctimas sin que estos en un primer instante se dieran cuenta de su aspecto.
Se decía de este feroz ser que no tenía ningún tipo de sentimiento de compatibilidad con la raza humana, y que por esta razón, con la fuerza que tenía en sus grandes músculas les reventaba los huesos matándolos con gran rapidez. Se decía que era tan cruel que era para él de un gran agrado y entretenimiento escuchar el crujir de sus huesos al reventarlos vértebra por vértebra.
De no conseguir su cometido el H-Wayak hacía un gran desastre en todo el ambiente natural que le rodeaba, ¿de qué modo desataría su furia esta criatura al no obtener sus placeres de homicida? Pues, este desprendía de su raíz a todo árbol que encontrara de pie; ocasionándole no solo la muerte segura a este también ser vivo, sino que después de eso este gigante destrozaba todo su tronco y lo lanzaba provocando un paisaje devastador para ese que había sido alguna vez un hermoso paisaje.
Esta criatura, además de ser gigante, tenía unos músculos increíblemente grandes y era de color verde, con una mirada de furia funesta; también poseía unos cabellos largos que nunca se había cortado y que se mostraban tan alborotados tal como una estopa de las que crecen en los árboles.
Cuenta una historia acerca de una señora que salió de su casa cuando ya el sol se estaba escondiendo para tender su ropa lavada, y en esto, el H-Wayak la precisó para tomarla con sus gigantescas manos y así romperle sus dos piernas.
Kakasbal
Empecemos con el origen etimológico del nombre de este ser mitológico. Ka, que significaba algo así como dos veces; Kas que es la sílaba que le corresponde al significado malo o maldito y baal que nos dice que este estaba como escondido.
Se asocia su imagen a una de las cosas más repulsivas que alguna vez pudo haber conocido un maya. Se dice que este era de gran estatura y que tenía pelos prominentes en absolutamente todo su cuerpo, el que yacía deforme. Este también tenía muchos pies y también gran cantidad de brazos. De sus manos salían, en vez de uñas, garras de cuervo. Además, una de las cosas más horribles que este tenía eran testículos que envolvían casi todo su cuerpo; eran esos no cualquier tipo de testículos, sino más que los de un mono. El resto de cuerpo también estaba compuesto por órganos de cualquier cantidad de animales.
De los ojos del Kakasbal se sabe que aquel que lo mirara, caía muerto de forma inmediata. Pero, no es que cualquiera pudiese verlo, porque la mayor parte del tiempo este era tan solo una sombra. Solo cuando el quisiera ser visto es que alguien notaría su presencia y pobre del que se atreviera a ver sus ojos porque ese sería el fin de sus días. No se documenta qué necesita el Kakasbal para hacerse visible ante una entidad humana; quizá tendría que ver con sus ánimos o del deseo de la providencia divina.
Además, de su caminar se conoce que este no tenía pasos, sino que se desplazaba como arrastrándose y en ese interín dejaba un desastre en el que los árboles se destrozaban y los animales morían de facto. Así que si alguien estaba cerca, podía huir si sabía que esos terribles panoramas los dejaba un Kakasbal. La voz de este ser demoníaco era tal y como la de un cantante de rock muy pesado: grave y gutural. Muy digna de infundir el mayor de los miedos al que lo escuchara.
La voz de Kakasbal
No solamente miedo infundía su voz, ya que, a quien escuchara a este peligroso ser, podía empezar a confundirse creyendo que las palabras que él emitía provenían de la voz interna de la persona. Pero no se trataba de ningún pensamiento: era la mala intención de alguien que quería causar sufrimiento y el rompimiento de la unidad.
La voz del Kakasbal convertía a los hombres buenos en malos, haciéndolos pertenecer al lado oscuro de la historia maya. Provocaba en ellos sentimientos ambiciosos, codiciosos, fríos y verdaderamente violentos. Transmutaba completamente la personalidad de cualquier alma pura y de buena intención.
El propósito del Kakasbal se puede ver reflejado en la conversión que le hacía a los hombres; y esta no era otra que la de ensombrecer todo corazón que se le atravesara de por medio para convertir a todo el poblado en manifestaciones terrenales del mal.
Muy pocos hacían notar la presencia de este peligroso ser porque pasaba desapercibido. Quien la notaba, por alguna extraña razón, moría de forma inmediata. Vemos cómo ni siquiera el que pudo dar cuenta de que estaba acechado por este, pudo huir. Quería adueñarse de toda alma pura si no se dejaba seducir por su engaño.
Decían que su presencia no solo podía matar a los humanos, sino que de él desprendía un venenoso aire que mataba a todos los seres vivientes que lo rodeaban; seres tales como plantas y animales. Esto suponía que los mayas perderían toda cosecha si este feroz pasaba por sus sembradíos, dejándolos sin su reserva alimenticia.
Convertía cualquier siembra en polvo, intoxicándola y dejándole desatada las peores de las pestes para que ese sitio no sirviera más como fuente de recursos. Situación que dejaba a los mayas desfavorecidos y teniendo que buscar otros campos para trabajar la tierra.
Otras cosas a saber sobre este animal mitológico
A veces, este ser también devoraba carne humana y se mostraba cínico al terminar de hacerlo porque tomaba sus huesos y los llevaba a casa de los familiares de su víctima para poder, a lo lejos presenciar sus caras de desolación y tristeza.
Hay una historia fascinante en torno al mito del Kakasbal y trata acerca de un hombre que era muy muy pero muy pobre y se desquitaba con su perro para depositar en él sus violentos maltratos y su gran frustración.
En esta situación el perro se sentía triste y decaído puesto que se supone que ningún amo debería tratar de esta forma a sus mascotas; y en eso el Kakasbal ha visto lo que acontecía y ha llamado al perro para preguntarle cómo estaba, a lo que este respondió que se encontraba muy desilusionado de su amo.
Después de toda la charla que tuvieron (cabe destacar aquí que este demoníaco ser hablaba con los animales) el Kakasbal le quiso hacer una propuesta indecorosa al canino.
La propuesta de este ser aterrador hacía el perro era para saber si este animal quería vengarse de su amo, a lo que respondió con un rotundo NO muchísimas veces. Y fue tanta la insistencia del que proponía, que el perro -porque ya estaba muy fastidiado- terminó aceptando con la condición de que se le otorgaran la cantidad de huesos que equivalían a su número de pelos en todo el cuerpo. ¡Y vaya que era un perro peludo!
El Kakasbal emocionadísimo porque le aceptaron la propuesta, se puso a contar los pelos del perro mientras le decía que a cambio de ese favor, necesitaría su alma. El perro, en medio de el conteo decidió interrumpir al que concentrado estaba en su asunto mil veces porque se sentía culpable por traicionar a su amo; en eso el Kakasbal renunció a la labor que había comenzado y tuvo la siguiente respuesta:
–No cuento más. Me has engañado; pero me has dado una lección. Ahora sé que es más fácil comprar el alma de un hombre que el alma de un perro.
Esa anécdota del perro y el Kakasbal es muy famosa hasta los días de la actualidad, mostrando que los mayas creían en la fidelidad de los perros hasta en las peores circunstancias. Y esa es una de sus características: la admiración de todo animal que poseyera cualquier cualidad que beneficiara a esa antigua civilización.
Perros
A pesar de ser este un animal que en la cotidianidad vemos, para los mayas tenían cualidades que sí que eran mitológicas porque nadie en la actualidad pensaría de esa manera acerca de criaturas que gran parte de la población posee en casa llamándolas como mejores amigos del hombre.
Esta antigua civilización creía una variedad inmensa de cosas increíbles acerca de los perros como que estos eran los encargados de llevar las almas de sus amos al inframundo. El inframundo de los mayas era un sitio a donde paraban todas las almas cuando dejaban sus respectivos cuerpos y lo llamaban Xibalbá; este lugar, al igual que la civilización maya, tenía sus jerarquías. Los mandatos no eran impuestos por humanos, no. Eran dictados por los dioses del inframundo que aparentemente eran terroríficos.
El perro en ese antiguo México también formaba parte de la cadena alimenticia de los humanos; algo que, sin duda, en la actualidad de occidente está completamente mal visto porque se considera al perro un leal compañero. Eso muestra cómo la toma de conciencia humana a través del tiempo ha modificado las formas de comportamiento de esta con respecto al valor que tienen los animales.
Que no se entienda que el perro era tampoco una comida habitual para los mayas, no. Si este iba a ser ingerido, se le consumía sólo en los rituales de sacrificios humanos porque al parecer le conferían a estos animalitos un valor especial que debía acompañar al plato con maíz y pavo en plena ceremonia.
De esta forma se cumplían con los requerimientos de las uniones con su Dios.El sacrificio era inevitable cuando se trataba del perro de un difunto amo.
Cuando el dueño de un canino moría, parece que necesitaban de su corazón en el ritual para honrar esa muerte en presencia de la espiritualidad maya y luego, después de eso, para no desperdiciar la carne del mismo, lo comían acompañado de los otros alimentos que hemos mencionado en el párrafo de arriba.
Jaguar
Hemos hecho una pequeña mención de este ser poderoso al principio del texto, pero esta no ha sido la más idónea para toda la fuerza que ejerce este felino en la influencia de la cultura maya antigua.
Bien, empecemos con el hecho de que los mayas consideraban al jaguar como un símbolo de poder y fortaleza. Lo llamaban el señor de los animales dado que tenía gran velocidad y habilidad para la caza.
Asimismo, se tenía la creencia de que solamente este animal era capaz de manejar las fuerzas cósmicas a su antojo, tanto las del día como las de la noche. Como su actividad empieza a cobrar vida cuando sale el sol, pusieron a este como símbolo de la oscuridad y la luz, dejándole un carácter esotérico y misterioso.
No solo el jaguar manejaba las fuerzas cósmicas, sino que también en su viva piel estaba la representación viviente de las estrellas (cabe destacar que las estrellas representaban un símbolo del inframundo para los mayas, pero eso nada tenía que ver con lo que demostraba ser este animal).
Esta antigua civilización sostenía que los jaguares, durante la noche, eran el Dios del Sol disfrazado para visitar y conocer el mundo temible de la oscuridad donde quedaban los muertos al irse de la faz de la tierra.
En las manifestaciones culturales y artísticas los jaguares tuvieron mucha cabida, dejando eso en evidencia el lugar privilegiado que le asignaron a este. Todo eso se ve en las estatuas de piedras y en las obras preciosas hechas con jade.
El jaguar fue fuente de inspiración para todo cuanto decidieron adornar los mayas. Tanta fue su influencia, que hasta en la ropa -específicamente en los tejidos- ellos llevaban a este felino para demostrar su fuerza como una virtud que le es dada por el mismo.
Estos animales también estaban reflejados en sus utensilios cotidianos de metal y en sus cerámicas; por esta razón, la civilización, le otorgó un lugar sagrado que lo asociaba al Dios que más poder tenía en esa cultura.
En las batallas en las que tenían que hacer acto de presencia los mayas, estos vestían con las pieles de estos felinos para usarlas como una especie de amuleto que, en su entender, los haría muchísimo más fuertes.
Otra de las formas en la que los mayas se sentían favorecidos por los jaguares, era la de imitar sus sonidos; rugiendo con tal fuerza, que asustaban a sus enemigos al escucharlos. Vemos cómo ese feroz sonido también tiene un lugar en el miedo del imaginario colectivo actual, entonces, ¿qué tan alejados estamos de entender esta antigua cultura si podemos asociar tal simpleza con tanta rapidez?.
Otras curiosidades sobre el jaguar
También, los líderes de esa época, como emperadores y sacerdotes; usaban en sus atuendos y vestimentas, las imágenes de un jaguar. Todo esto mostraba el tipo de relación entre mítica y religiosidad que conservaban en la presencia de su imagen. Y no solo su imagen estaba sobre la piel de estos jerarcas, porque llevaban consigo sus garras para tenerlas encima y además su piel como abrigo para simbolizar y demostrar su liderazgo.
Increíblemente hasta los tronos de aquella época estaban cubiertos de las pieles de estos felinos. Dejando demostrado cuán sagrado podía ser el sitio de un líder de la Mesoamérica.
Tanta importancia le fue dada al felino que le pusieron sus características físicas y actitudinales a uno de sus muchos dioses. Este fue el caso de Kinich Ahau, que también se le llama Dios del jaguar. Este rondaba por las noches y representaba el inframundo. Su cuerpo parecía al de un jaguar porque sus orejas eran muy similares, sus dientes puntiagudos y la barba era del color del pelaje del mencionado felino.
En la astrología prehispánica, se tenía la creenci de que los nacidos en una determinada fecha con el signo de océloti, iban a tener las propiedades y fuerzas de un jaguar. Por tanto, a los nacidos en esa fecha, los mayas, los querían a su lado para dar lucha en un combate.
Si prestamos atención a la historia maya, podemos encontrar una gran contracción, puesto que surge una ambivalencia en el mito de este grandioso animal: así como representa fuerza y valentía para los combates, también tiene lugar en el inframundo cuando representa al Dios del sol cuando visita a los muertos en el inframundo.
Venado
La palabra venado es del vocablo Ceh y en ese sonido está gran parte de los apellidos de la zona donde habitaron los antiguos mayas. El venado, era un animal que les servía a esta cultura para honrar a sus dioses. ¿De qué manera? Pues, sacrificándolos. Ya vemos que una conducta habitual en ellos era el sacrificio, cosa que también otras culturas antiguas tienen arraigada en su haber.
En El Mayab, sitio que pertenecía a aquella civilización, había una gran densidad poblacional de venados. Y se dice, que estos, para ese entonces tenían un color de piel mucho más claro; dejándolos como presa fácil para sus cazadores, que disfrutaban mucho del sabor de su carne. También usaban a estos animales como escudos en las batallas, despellejándoles y pegándoles esas pieles en pedazos enormes de metal para adornarle y hacerle más fuerte.
Leyenda del venado
Cuenta una antigua y curiosa leyenda que un día un venadito bebé bebía líquido en el momento en el que escuchó unas voces extrañas. Estas correspondían a la de unos cazadoeres, que cuando vieron al pequeño empezaron a atacarle lanzando muchas flechas y en el momento justo en el que la flecha iba a hacerle daño, el animal pudo salvarse de la situación cuando un resbalo lo llevó a una cueva oculta detrás de unas matas.
Esa cueva realmente era una guarida, y en ella, habitaban tres genios bondadosos que escucharon al bebé llorando porque se había lastimado en medio de la huída. Ellos tres, como buenos que eran, curaron al venadito y lo escondieron en su morada durante unos días. El animalito estaba tan agradecido que no dejaba de hacerles cariño a los magos y, en consecuencia de eso, lo empezaron a querer.
Cuando el animalito sanó, decidió marcharse de la cueva, pero antes uno de los magos le dijo que le podía conceder un don y que sin importar cuál de tantos quisiera. El venado respondió que quería que todos los de su tipo estuvieran protegidos del hombre humano, entonces ellos lo concedieron echándole en su cuerpo tierra del piso y cambiándole de color. Esto lo escondería.
El venadito estaba tan feliz por la noticia que fue a informarles a sus hermanos y ellos en aquel júbilo le agradecieron al pequeño. Además, este también les advirtió que si llegaran a encontrarse en problemas podían esconderse en la guarida de los magos. Por eso es que estos animalitos aún existen, según los mitos. Los humanos con su sed de consumo no pudieron atraparlos porque supieron esconderse gracias a los tres amigos.
Algunos autores y escritos sobre los animales mitológicos mayas
Algunos autores asocian a los animales mitológicos mayas con el folklore británico porque se cree que en algún momento los mayas y los británicos tuvieron un encuentro en el Caribe para el siglo XVI y es de esta manera porque John Hawkins documentó su viaje de una expedición en 1568.
En conclusión, podemos notar lo rica que es una cultura en cuanto vemos sus historias míticas espléndidas. Gracias a esta, la maya, actualmente América Latina ha sido influenciada de una forma apoteósica por sus creencias que, al mismo tiempo, han alimentado un sinfín de conocimientos que ahora podemos disfrutar por todos esos luchadores y pensadores de momentos tan antiguos.
En este vídeo puede usted, de manera interactiva y dinámica, tener más información acerca de los animales mitológicos mayas de aquella antigua y genial época que revolucionó la historia de América Latina y la humanidad entera:
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