La venida de Cristo siempre ha constituido un enigma para el creyente, y aunque la iglesia católica orienta sobre este aspecto, aún los fieles no se sienten seguros sobre ese episodio prometido. En este artículo, encontrarás algunas respuestas a tus inquietudes, sobre la llegada del Señor. Solo quédate con nosotros, conoce la verdadera historia de la segunda venida de Cristo. Este hecho es muy significativo para la humanidad. Entra, te encantará!
Indice De Contenido
- 1 La venida de Cristo según la biblia
- 2 Versículos sobre la venida del Señor
- 3 Prédicas
- 4 La venida de Cristo y el rapto de la iglesia
- 5 Mensaje
- 6 Reflexión
- 7 Señales que La venida de Cristo está cerca
- 8 Enseñanza
- 9 Estudio
- 10 ¿Qué falta para la venida de cristo?
- 11 Señales de la venida de Cristo en Israel
- 12 La segunda venida de Cristo y sus dos etapas
- 13 La tercera venida de Cristo
- 14 La venida de Cristo y el fin del mundo
La venida de Cristo según la biblia
Las Escrituras tratan, en varias de sus secciones, sobre el momento en que Cristo volverá para juzgar a los seres humanos. Al respecto, los versículos y profecías contenidos en el texto bíblico, dejan cuenta de que Cristo vendrá luego de varios acontecimientos, que se desarrollarán en el mundo, los cuales serán una señal de que la venida del Señor se aproxima, lo que constituye una de las creencias del cristianismo más sólida que existe.
Al respecto la Biblia nos ilustra sobre lo primero que hará el Hijo del Hombre a su llegada a la tierra, esto se encuentra contemplado en Mateo 25:31-33.
Ese momento donde se juzgará a las naciones se escenificará paralelamente una “gran tribulación”, o angustia, como nunca jamás habría sucedido. Al término de esa tribulación, se dará paso a la guerra de Armagedón (Mateo 24:21; Revelación [Apocalipsis] 16:16). Los enemigos de Cristo, que él representó como cabras, a cuyos fines se señala que serán objeto de la justicia y castigado con destrucción por toda la eternidad. (2 Tesalonincenses 1:9; Revelación 19:11,15). En contraste, sus siervos fieles, las ovejas, lograrán la “vida eterna” (Mateo 25:46).
¿Cuándo vendrá Cristo?
Jesús expresó: “Respecto a aquel día y hora nadie sabe” (Mateo 42;25:13). No obstante, igualmente conversó de una señal conformada por varios episodios que serían perceptibles y que ocurrirían exactamente previo a su venida (Mateo 24:3; 7:14; Lucas 21:10,11).
¿Vendrá Cristo en cuerpo carnal o espiritual?
Por cuanto Jesús revivió en un cuerpo espiritual, es claro que no llegará con en cuerpo físico (Corintios 15:45; 1 Pedro 3:18). Por ello, el día antes de su muerte, Jesús les comentó a los apóstoles: “Un poco más y el mundo ya no me contemplará” (Juan 14:19).
Versículos sobre la venida del Señor
No se debe equivocar la segunda venida del Señor con el Arrebatamiento, ya que son dos episodios diferentes; en el primero, Jesús mismo sonará la trompeta, los difuntos se alzarán (resucitados con un cuerpo cambiado).
Luego se le da paso a la Gran Tribulación de siete años: 3 años y medio de paz y 3 años de guerra, después la tierra es reprendida por Dios: En esos 7 años viene el gobierno del anticristo, lo más inhumano que haya pasado jamás, luego vino Cristo conjuntamente con los santos, es decir, la Iglesia de Cristo tal como lo contempla el libro del Apocalipsis.
Debemos estar dispuestos, los que nos confesamos cristianos; ser ejemplo íntegro frente a los hombres y a Dios, para dirigirnos a nuestros semejantes, y que nuevos transformados asuman al Señor.
Jamás expresemos que falta mucho o poco, para evitar que seamos sorprendidos y seamos abandonados por el Señor, lo cual sería desastroso para los cristianos, en vista de que el anticristo acometerá a los cristianos que se queden, según sentencia Pedro:»Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche… « Pedro 3:10
Prédicas
La actitud de la mayor parte de los habitantes de este mundo, ocupados en sus ambiciones, sumergidos en sus placeres, en su resguardo, su escepticismo; se puede encuadrar en la verdad Profética más indudable que nos indica, anuncia y predica sobre la segunda llegada de Cristo a la tierra.
En la palabra de Dios encontramos nuestra seguridad, salvaguardia, esperanza y confianza y de que lo que está sucediendo en el mundo nos grita que Jesús vuelve pronto, y es tu deber alistarte para tan extraordinario episodio.
Frente al desequilibrio imperante en el mundo, ante las dificultades cotidianas la biblia nos capacita a fiarse en Dios en vista de que él posee el control, y ha ofrecido finalizar todo lo malo. Por eso, en esta oportunidad, hemos aprendido a:
- No aturdirnos y pensar que Jesús volverá para llevarnos.
- Poseemos la palabra profética más indudable, a la cual favorecemos al estar pendientes, ya que la evidencia es inspirada.
- Y finalmente, Cristo viene para exterminar a los impíos, pero igualmente para conducir a sus hijos al sitio que ofreció, donde abunda la justicia, el gozo, la paz y la felicidad.
La venida de Cristo y el rapto de la iglesia
Dios expresó en Daniel 9:25 que desde la orden de volver y rehacer a Jerusalén hasta el Mesías Príncipe (Jesús) habría dos periodos: uno de 7 semanas (7 ciclos shemitta que totalizan 49 años) y otro de 62 semanas (ciclos shemitta que hacen 434 años). La causa por la que las 69 semanas se fraccionan en dos períodos es que se tendrán dos venidas del Mesías Príncipe.
En Daniel 9:26 él revela que el periodo de 434 años (62 semanas) ya fue consumido en la Primera Venida de Jesús, cuando falleció y revivió. Eso aún deja el período de 49 años (7-shemitta) para ser desarrollado.
Solamente se sucedieron dos órdenes de volver y construir Jerusalén: la primera fue el año 445 A.C. La segunda en abril de 1969.
Si contamos siete ciclos shemitta de 49 años, desde el ciclo shemitta inicial, luego de 1969 (Segundo Decreto); la Segunda Venida de Cristo podría suceder el año 2022. El Rapto debe llevarse a cabo cerca de 3 años y medio antes de finalizar la tribulación, lo cual sería, en el mejor de los casos, en la primavera de 2019.
Mensaje
Lo más significativo de la alocución de Jesús sobre la Segunda Venida, y la finalización de la historia, no es el asunto de cuándo va a pasar sino, qué debemos hacer en tanto llega ese momento.
El propio Jesús nos hizo un llamado a estar “despiertos” (Mateo 24:42; 25:13); no con la intención de estar esperando u orando, ni con preocupación o temor, sino, “manteniéndose firmes” (24:13) frente a la tentación de consentir que “el amor se enfriará en muchos” (v 12).
Se debe estar “despiertos, porque no saben en qué día vendrá su Señor” (v 42); se debe igualmente estar “preparados” (v 44) y “cumpliendo su deber” (v 46).
¿Cómo? ¿Cumpliendo qué deber?
La versión de acuerdo a Mateo, de ese extenso discurso de Jesús, describe visiblemente lo medular, lo más importante, la que se concluye de todo el discurso: «Cuando el Hijo del Hombre llegue [o sea, en cualquier momento que venga] en su gloria…, apartará a unos de otros….
Entonces el Rey expresará a los que se encuentran a su derecha: ‘Vengan …y tomen posesión del reino…. Porque tuve necesidad de comer y ustedes me saciaron; sentí sed y ustedes me dieron de tomar. Fui forastero y ustedes me acogieron en su casa. Anduve sin ropas y me vistieron. Estuve enfermo y me visitaron. Estuve en la cárcel y me fueron a ver.
“Entonces los justos expresarán: ‘Señor, ¿Cuándo te vimos con hambre y te dimos de comer, o con sed y te dimos de beber? ¿Cuándo te vimos forastero y te recibimos, o sin ropa y te vestimos? ¿Cuándo te vimos convaleciente o en la cárcel, y te fuimos a ver?’ El Rey responderá: ‘En verdad les digo que cuando lo hicieron con alguno de los más pequeños de estos mis hermanos, me lo hicieron a mí’” (25:31-40).
Existiendo de esta manera, en misericordia y solidaridad, y combatiendo por un mundo donde no haya numerosos hambrientos, el amor no se congelará. Es como si Jesús expresara: “No se angustien por el día ni la hora de mi llegada, no derrochen su tiempo en ello, sino ocúpense en hallarme y servirme en los necesitados(as). En ellos estoy y he llegado.
Vendré de nuevo en gloria cuando llegue el reino de Dios, pero lo importante no es especular sobre cuándo sino en lo que hay que hacer ahora para colaborar a que se aproxime el reino de justicia, paz, y amor”.
Reflexión
Jesús está regresando. Pocas personas son los que verdaderamente advierten ello, o dan la correspondiente importancia a un mensaje con ese tema. Pero de esta manera se expresa la palabra de Dios en Lucas 11.28: “Y Él dijo: Antes bienaventurados los que oyen la palabra de Dios, y la guardan”.
El Señor nos sugiere, no únicamente escuchar sus palabras, sino también conservarlas; y uno de los aspectos que expuso Jesús y que debe mantenerse permanentemente en nuestro corazón, es lo importante de estar listo para su retorno.
La palabra del Señor nos instruye que Dios llegó al mundo como hombre para salvar los pecados de la humanidad (Juan 1.14), y la población que lo ha acogido y conservado hondamente sus palabras en su corazón, en todas sus formas de vivir, tienen una herencia con Él en el reino celestial (Romanos 8.17).
Los tesoros de los cuales vamos disponer en el cielo, son consecuencias de lo que cultivamos en esta tierra; lo que poseeremos allá nadie lo puede robar o hurtar, será una perpetuidad de gloria para los reconocidos hijos de Dios.
Y tal como se encuentra plasmado en Apocalipisis 2.7:
Nuestro ingreso en el paraíso no está sujeto, únicamente, nuestras bondadosas obras, también dependen de una vida de fe y lealtad a Dios. Como nos reseña Efesios 2.9). Para prepararse en ser fiel a Dios tenemos que rezar, tomar lectura de su palabra y bendecir todo lo que somos a Él.
Jesús, ese que llegó al mundo nos prometió que iba a retornar para buscar esos que le sirven con fidelidad para vivir una existencia de gloria por siempre con Él. Para los que se queden, habrá sufrimiento y horror, por haber negado el nombre de Su Redentor y no haber aprovechado suficientemente la grandeza de servir a Dios.
Él nos avisa que el día y la hora de la llegada, nadie lo sabe sino el Padre Celestial, de acuerdo a Marcos 13.32. Jesús puede llegar incluso hasta en este preciso instante, mientras usted toma lectura de estas palabras, pues Él nos expresó: “Vosotros pues también, estad apercibidos; porque a la hora que no pensáis, el Hijo del hombre vendrá” (Lucas 12.40).
Pero, Él nos expuso que las señales se cumplirían cercanas a su venida, y todas ya están así ocurriendo; tal como Él nos dijo en el capítulo 13 de Marcos.
Nos dio este sabio consejo en Marcos 13:28-30: “De la higuera aprended la similitud: Cuando su rama ya se conmueve, y brota hojas, conocéis que el verano está cercano: de esta manera, además, vosotros, cuando viereis hacerse estas cosas, conoced que está cerca, a las puertas. De verdad os digo que no pasará esta generación, que todas estas cosas no sean hechas.”
Jesús nos puso sobre aviso numerosas veces sobre su llegada; entre estas Él así se nos dirigió: “Bienaventurados aquellos siervos, a los cuales cuando el Señor viniere, hallare velando” (Lucas 12.37)” y, además, a todos expresó: “Velad, vigilad y orad, el Rey está llegando pronto. Que Dios contribuya con cada uno de nosotros para estar preparados en ese gran día, donde daremos cuenta de todo lo que sembramos para nuestro buen Señor.
Señales que La venida de Cristo está cerca
Si usted se reconoce como un seguidor de Jesucristo, debe conceder especial cuidado a las instrucciones que Él nos proporciona: “Velad, pues, en todo tiempo orando que seáis asumidos por dignos de apartarse de todas estas cosas que llegarán, y de estar en pie frente del Hijo del Hombre” (Lucas 21:36)
Guerras, violencia y anarquía
Esté pendiente a guerras pequeñas y grandes, étnicas, y de toda especie; y a la acentuación de la violencia y la anarquía en la comunidad mundial.
Sequía y hambre
Falta de lluvia y escasez de alimentos. Estas cosas se esparcirán sobre la tierra a gran escala; en cantidades jamás vistas. Sí, definitivamente las cosas van a agravar.
Terremotos y otras catástrofes naturales
Dios anuncia en sus palabras que los terremotos y otros desastres naturales se incrementarán. Jesucristo indicó que previo a su regreso habría “terremotos en distintos sitios” (Marcos 13:18, Mateo 24:7). La población conoce muy bien que en los últimos años se ha incrementado la incidencia de terremotos, en ocasiones en las zonas más imprevistas.
Esta propensión va a seguir porque así lo indica la Biblia. Jesucristo lo profetizó, y es, por tanto, lo que se debe aguardar. Debemos estar pendientes de la cantidad y magnitud de los terremotos, porque irán en creciendo y serán cada vez más devastadores severos.
Enfermedades y epidemias
Existen une cantidad de enfermedades contagiosas que ya son motivo de inquietud para los países. El SIDA, por supuesto, es la que más se alude. No obstante, vemos el resurgir de patologías antiguas de la humanidad, que se creían ya extirpadas como la difteria o la malaria, que ahora son resistentes a antibióticos que antes se usaban para enfrentarlas.
Mientras, otros tipos de afecciones como el cáncer y cardíacas continúan afectando a millares de personas, en tanto que los residuos de la era tecnológica cada vez contagian más el agua potable y los alimentos que consumimos.
El emerger de una potencia del islam, agresiva y fundamentalista
La Biblia profetiza que al final de los tiempos surgirá en el África del Norte o el Medio Oriente un personaje carismático con capacidad de unir y guiar a un fuerte grupo de naciones, entre las cuales Egipto cumplirá un papel primordial.
La Unión Europea logrará predominio de corte mundial
Enseñanza
La segunda venida de Cristo fue garantizada en el Nuevo Testamento, pero únicamente eso, sino que, además, fue planeada en el Nuevo Testamento. Quien tuvo la ocasión de observarla fue el Apóstol Juan, el que ha aportado para nosotros su experiencia en el libro de Apocalipsis, capítulo 19 versículos 11 a 19. (También podrá ver: Bautismo cristiano)
Extraeremos de este pasaje, inicialmente, una invitación de Dios a las aves de los cielos, para que acudan a la gran cena de Dios. Apocalipsis 19:17-19 señala: “Y vi un ángel que estaba en pie en el sol, y clamó a gran voz, expresando a todas las aves que sobrevuelan en medio del cielo: Venid, y congregaos a la gran cena de Dios, para que comáis carnes de reyes y de capitanes y carnes de fuertes, carnes de caballos y de sus jinetes, y carnes de todos, libres y esclavos, pequeños y grandes”.
La cena es para las aves de rapiña. La comida de la cena son las carnes de los millones que fallecerán cuando llegue el Señor Jesucristo por segunda vez. No habrá distingo de personas. Sucumbirán reyes y plebeyos, capitanes y soldados rasos, fuertes y débiles, personas de a caballo y de a pie, libres y esclavos, pequeños y grandes. Incluso los caballos no serán condonados.
De una manera artística, Apocalipsis 14:19-20 nos dice de esta matanza en los siguientes términos: “Y el ángel lanzó su hoz a la tierra, y recogió la viña de la tierra, y echó las uvas en la gran bodega de la ira de Dios. Y fue pisado el lagar afuera de la ciudad, y brotó sangre hasta los frenos de los caballos, por mil seiscientos estadios”.
La gente es observada como uvas maduras en un viñal. El labrador que es Jesucristo manda al ángel que seccione con una hoz esos racimos, y los eche en un lagar fuera de la ciudad. Después él mismo pisa el lagar. Esto lo conocemos por lo que expresa Apocalipsis 19:15:
Lo que regularmente sale de un lugar es el néctar de las uvas, pero de este lagar afuera de la ciudad surgirá sangre. Abundante sangre que colmará un extenso valle hasta más de un metro de alto. Por esta razón las aves de rapiña disfrutarán de un gran banquete.
En segundo lugar, hallamos una invasión militar en Israel. Apocalipsis 19:19 sustenta: “Y observé a la bestia, a los reyes de la tierra y a sus ejércitos, aglutinados para guerrear contra el que montaba el caballo, y contra su ejército”.
Rememorando sobre lo que se analizó en la campaña de Armagedón, cuando el ejército del Anticristo, la bestia, se hallaba en Jerusalén para rechazar la imperiosa agresión de un nutrido ejército de 200 millones de jinetes a caballo, que adelantaba desde el Oriente sobre el lecho reseco del río Eufrates.
Pero justamente previo a que se traben en batalla, algo sucederá, por lo cual, como que desconocerán que son enemigos y unirán sus fuerzas enfrentar a un enemigo común, el que se aproxima sobre un caballo y sus ejércitos. La Guerra de Armagedón habría iniciado.
Estudio
Se reseña en los estudios bíblicos que en la segunda venida de Cristo, la Iglesia desciende para reinar con Cristo durante mil años. Apocalipsis 5:10:
“ Bienaventurado y santo el que posee parte en la primera resurrección; la segunda muerte no posee potestad en ellos, sino que se convertirán en sacerdotes de Dios y de Cristo, y reinarán con él por mil años” Ap 20:16.
“Y posarán sus pies ese día en el monte de los Olivos, que se encuentra enfrente de Jerusalén, al oriente; y el monte de los Olivos se fraccionará al medio, y se separará hacia el este y hacia el occidente, creando una cuenca muy extensa; y la mitad de la montaña se desplazará al norte, y la otra parte al sur».
«Y escaparéis al valle de los montes, porque el valle de los montes llegará hasta Azal; huiréis de la forma que corriste por causa del terremoto en los días de Uzías rey de Judá; y vendrá Jehová mi Dios, y con él todos los santos” Zac 14:4-5.
Con los versículos presentados, evidenciamos que Jesús descenderá junto con la iglesia a reinar durante mil años en esta tierra. Con esto se comprobará que la Iglesia será arrebatada para el cielo, previo a que llegue el mal o la Ira de Dios, y que la Iglesia se mantendrá en las mansiones celestes, hasta que finalice el tiempo de la tribulación en la tierra.
La Iglesia será raptada previo al comienzo de la tribulación. Algunos piensan que toda la Iglesia será arrebatada, conducida ante El Señor, previo a que empiece cualquier parte del periodo de los siete años de tribulación. Las personas que mantienen este punto de vista se les llama pre tribulacionistas.
¿Qué falta para la venida de cristo?
¿Conoce alguien el momento exacto de la segunda venida de Cristo? de acuerdo a las santas escrituras dispuestas en la Biblia, Mateo 24:36, «Pero del día y la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino sólo el Padre».
Sabiendo que la pereza es algo muy humano, ¿qué nos dice Cristo que hagamos? Está en la Biblia, Mateo 24:42, «Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor».
Señales de la venida de Cristo en Israel
Las siguientes señales notables están asociadas con Israel, las cuales revelan que el señor viene pronto:
- Retorno de los israelitas a la tierra prometida.
- Renacimiento de la nación de Israel.
- Reimplantación del idioma hebreo.
- Reconstrucción de la tierra prometida a Israel.
- Restablecimiento de ciudades antiguas y la evolución de nuevos pueblos y ciudades.
- Reconquista de la ciudad de Jerusalén.
- Restauración del templo en Jerusalén.
La segunda venida de Cristo y sus dos etapas
Al plantear que el rapto de la Iglesia será previo a la Gran Tribulación, el dispensacionalismo se ve presionado a fraccionar la Segunda Venida de Cristo en dos fases: una invisible, justamente previa a la Gran Tribulación, cuando Cristo “raptará” a los escogidos clandestinamente y los conducirá al cielo; y otra etapa, visible, luego de los siete años de Gran Tribulación, cuando Cristo llegará con la Iglesia a la tierra. Las podemos denominar como la “primera” Segunda Venida y la “segunda”.
La tercera venida de Cristo
Entre las dos venidas reconocidas del Señor a este mundo, una ya del conocimiento de la humanidad y otra esperada, que se le identifica bajo la denominación de Parusía; hay, no para todos, solamente para sus seleccionados; una tercera venida, que no se puede observar con los ojos de nuestro rostro, pero sí con los del alma, y ellos la sienten y se quedan embelesados por la presencia especial del Señor en la interioridad de su ser.
Es San Bernardo abad (Sermón 5º en Adviento), el que nos refiere sobre esta tercera llegada del Señor, para reinar en las almas, que, por puramente amor hacia Él, se le han entregado de forma incondicional. Esto transcribe San Bernardo abad: En la primera venida, el Señor se reveló en la tierra y cohabitó con los hombres, aun cuando, como atestigua Él mismo, lo vieron y odiaron. En la última venida, todos observarán la salvación de Dios y contemplarán al que traspasaron.
La llegada intermedia, en contraste, es oculta, y en ella, únicamente sus seleccionados, ven al Señor en lo más interno de sí mismos, y de esta manera, sus almas se salvan ellas mismas, y a otras por la que intercedan. De esta manera, en la primera venida del Señor, vino en carne y hueso; en esta segunda llegada, en poder y espíritu; y, en la última, en majestad y gloria.
Para San Bernardo abad, la venida intermedia es como un camino, por donde se pasa de la primera a la última: En la primera, Cristo fue nuestra salvación; en la última surgirá como nuestra vida; y la venida intermedia, es nuestro descanso y alivio.
Él no deja jamás a los suyos, a los que llevan a cabo su palabra y la proclaman: “Acudid pues; mostrad a todas las personas, bautizándoles en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, revelando todo cuanto yo os he ordenado. Yo permaneceré con vosotros siempre hasta la concreción del mundo”. (Mt 28,19-20).
No obstante, este tercer regreso, personalmente para cada uno de nosotros, es el más importante, porque esa venida es la que puede alcanzar a abrasarte en la hoguera de su amor.
Probablemente Él, te puede amar tanto que puede hasta desgarrarte, para purificarte más, pero a ti entonces, si tienes la suerte de que te alcance ese instante, ya no te importará, porque posiblemente llegas a lograr la dicha total en este mundo, la dicha que logró de Santa Teresa de Lisieux, cuando expresó: “No es posible que ya pueda padecer, porque el sufrimiento se me vuelve en goce pensando en el Señor”.
Algún lector se puede preguntarse: ¿Qué debo hacer yo para poder lograr estar en esa tercera venida del Señor, en el interior de mí ser? Bien, primero que nada, es tomar en cuenta las palabras del Señor que nos dijo: “Si alguien me ama, guardará mi palabra, y mi Padre le amará, y acudiremos a él y en él haremos hábitat” (Jn 14,23).
Si bien es cierto que la inhabitación Trinitaria, la presentamos todos los bautizados que nos hallamos en gracia divina, o sea limpios de pecados mortales; pero existen grandes diferencias sobre la intensidad en la que cada uno experimenta esa inhabitación. Un elevado número de personas conocen, porque de esta manera se lo afirma la Iglesia, que son templos vivos de Dios y allí terminan sus conocimientos.
El Señor, nos dejó expresado: “El que percibe mis preceptos y los atesora, ése es el que me ama; el que me ama a mí será amado por mi Padre, y yo le amaré y me manifestaré en él”. (Jn 14,21). Y San Pablo, nos señala: ¿No sabéis que sois santuario de Dios y que el Espíritu de Dios mora en vosotros? Si alguien devastara el santuario de Dios, Dios le destruirá a él; porque el santuario de Dios es sagrado, y vosotros sois ese santuario”. (1Co 3,1617).
La venida de Cristo y el fin del mundo
Absolutamente nadie conoce cuándo será el fin del mundo. Previo a la venida de Cristo ha de originarse “la apostasía general”, es decir, se desatará una crisis religiosa a nivel mundial
1) El aviso del Evangelio ha de alcanzar a todas las naciones.
“Y este mensaje del Reino será llevado a todo el mundo para que las naciones lo conozcan; es entonces cuando llegará el fin”. (Mt. 24, 14).
2) Al término de la historia, Israel se reconcilia con Cristo y se salvará. “Una porción de Israel se va a volver severa hasta que todos de los paganos hayan entrado, entonces todo Israel será salvo” (Rom. 11, 25).
3) Al final, previo a la llegada de Cristo ha de originarse “la apostasía general”, es decir, habrá una crisis de religión a nivel mundial, ha de llegar el Anticristo. “No permitan que los asusten con algún mensaje espiritual como si fuese el día del Señor que ya llegó.
Previo a este día, debe venir primero la insurrección contra Dios, cuando surja el hombre del pecado que se asentará en el templo de Dios y será venerado, vendrá con mucho poder y con señales y milagros engañosos. Utilizará toda clase de maldad para falsear. (2 Tes. 2, 1 -12).
La segunda venida de Cristo (película)
La Segunda Venida es una producción cinematográfica del director Daniel Anghelcev, escrita por los dramaturgos Diana Angelson (Diana Busuioc) y Daniel Anghelcev. Dentro del elenco artístico se destacan las excelentes actuaciones, también de Diana Angelson, con la participación de Jason London y Quinton Aaron. Se estrenó en las pantallas de los Estados Unidos en el 2017.
La película mezcla partes bíblicas con episodios de ficción, y persigue estimular el interés de las personas en las profecías de los últimos años. Combina el presente con el pasado y el futuro de forma análoga, como lo hace el libro del Apocalipsis.
Como su nombre lo indica, su tema central es la Segunda Venida de Cristo. En ella se muestran los desastres naturales que suceden en la tierra antes de que ocurra, y la supervivencia de los que se quedaron en la tierra como punto central de la trama.
Es un excelente trabajo para evidenciar como la única esperanza y el único camino de la humanidad, no es otro que el camino a Jesucristo.
La venida de Cristo se acerca (Himno )
La iglesia cristiana siempre ha buscado la manera de expresar su agradecimiento y amor por Dios, una de ellas son las alabanzas, y un himno a su venida es una forma extraordinaria de expresarle adoración. Este himno es una composición poética inspirada por Dios, que simboliza y honra su grandeza. Se puede interpretar como un canto a su llegada y lo que se espera de ella para la humanidad.
La venida de Cristo se acerca
La venida de Cristo se acerca
pronto viene su iglesia a llevar
no durmamos estemos alertas
vigilad, vigilad, vigilad
Pronto viene Jesús y nos lleva
a la hermosa mansión celestial
pronto viene Jesús a la tierra
nos iremos con El a gozar
Si queremos que Cristo nos lleve
a los cielos con El a reinar
no seamos jamas negligentes
trabajad trabajad trabajad
Pronto viene Jesús y nos lleva
a la hermosa mansión celestial
pronto viene Jesús a la tierra
nos iremos con El a gozar
Arreglaos estemos a cuenta
con Jesús el Cordero inmortal
del que ofende tengamos clemencia
perdonad perdonad perdonad.